miércoles, 2 de abril de 2008

“Pedro y yo” de Judd Winick. Astiberri

"Pedro y yo" arranca en 1993. Judd Winick, un joven autor de cómic se presenta al casting del programa The Real World, un reality show de la MTV en la que un grupo de personas convive en una casa durantes seis meses y es finalmente seleccionado. A su llegada entabla amistad con Pedro Zamora, un joven homosexual de 22 años de origen cubano y seropositivo desde varios años atrás. Pedro utilizará el programa para sensibilizar a los espectadores en la prevención y lucha contra el sida. Esta obra autobiográfica levanta acta de la profunda amistad que surge entre ambos. Pedro y yo es el relato de esta historia real. Un formidable testimonio de amistad y lucha contra los prejuicios y la ignorancia, así como un homenaje a un joven brillante y admirable.

Nominada al premio al Eisner a mejor dibujo y guión del año, mejor libro del año 2000 por Publishers Weekly y ganador de 6 premios de la American Library Association por fin nos llega esta novela gráfica a nuestro país de mano de Astiberri.

La verdad es que me la compré porque me encantan algunos de los trabajos de Winick (de hecho en la lista de lo mejor del 2007 coloqué su Green Arrow bastante arriba), y eso que el tema no es que me atrajera demasiado, no es que sea demasiado halagüeño que digamos, pero entre la fama que tenía, los premios y demás no lo dudé un solo momento.

Anoche mismo empecé a leérmelo bastante tarde, con la idea de intentar avanzar lo máximo posible, cuando me di cuenta eran casi las 4 de la mañana y me había cepillado más de la mitad de la novela, no podía dejarlo, a pesar del tema que trata es superameno y entretenido, me encanta que no se centre en los momentos morbosos, o que no se deje llevar por el camino del drama fácil, realmente es emocionante, dramático, pero más por esa forma tan sincera además de directa de contarte las cosas, todo suena natural, la historia fluye por si misma, en ningún caso se ceba en el dolor, en la situación, y eso es algo grandioso, nunca cruza la línea, puede llegar a ser divertido, bonito, directo, romántico, franco, espontáneo, educativo, pero sobre todo veraz.

No puedo enumerar todos los momentos pero durante más de una vez me llegó completamente, es realmente emocionante, absorbente y al final te deja con ese magnífico sabor de haber leído algo tremendamente bueno. Realmente increíble.

Os lo recomiendo fervientemente, muy recomendable

Pos eso

1 comentario:

Anónimo dijo...

¡qué entusiasmo! dan ganas de leerla. BMil.