Uno de
mis autoregalos ha sido este flipante sujeta libros de “El Señor de los anillos”, recreando la visita de Gandalf a Bilbo. Hacía tiempo que lo había visto, alucinando en colores no sólo con las figuras sino con su precio casi prohibitivo, pero he aquí que uno de los proveedores de la tienda los estaba liquidando a precio de oferta, y no hay nada más tentador que una rebaja del 30% sobre el precio de coste del producto para la tienda, esas cosas que están haciendo que casi me arruine con cosas que salen casi regaladas.
Ahora que ya tenía las estatuas, sólo me faltaba una cosa para tener la colección completa, un ejemplar de “El Hobbit” que acompañase a los 4 tomitos de “El Señor de los anillos”, que no tardé en pedir como regalo extra a los reyes.
Mis historia con “El Hobbit” es bastante peculiar, la primera vez que intenté leérmelo debía tener 10 u 11 años, y nunca pasé de la página 30, me lo prestó uno de mis mejores amigos, sus padres se lo habían comprado del
circulo de lectores, y a él algo más de un año menor que yo, tampoco le había gustado, debió dejarlo más o menos en el mismo sitio. No fue hasta años después a los quince cuando después de leerme “El señor de los anillos” decidí darle otra oportunidad, y me encantó, pero nunca me lo compré. Me cuesta mucho comprarme libros que ya me he leído, principalmente porque no soy de los que releen, salvo alguna excepción, suelo pensar que un libro releído es una oportunidad perdida de leer otro diferente, como si no hubiera pocos libros ahí fuera esperándote.
y… ¿a que viene todo esto? Pues que por fin he encontrado una edición sin la que no podía pasar, que me ha dado ganas no sólo de adquirirla, sino que me ha animado a poner el libro en la lista de posibles relecturas a corto plazo.
Sobre el libro en sí, decir que conmemoran
do el 70 aniversario de su primera aparición los de Planeta/Minotauro nos han traído la edición foránea que celebra el cumpleaños de uno de los libros con los que más he disfrutado, “un viaje de ida y vuelta” para un Hobbit que no quería ni deseaba aventuras pero que por suerte del destino se vio envuelto en una de la que no podía escapar.
La edición respeta la primera edición del libro allá por 1937, con ligeros cambios que el propio Tolkien deseó pero que no pudo conseguir
por razones presupuestarias. Viene en una caja de madera preciosa, con un acabado increíble, dentro el libro viene con la famosa portada dibujada por su autor, con un separa páginas en verde y con las páginas en un color sepia maravilloso, además de 16 ilustraciones algunas en color con papel en alta calidad y otras en blanco y negro.
Es una edición limitada y numerada a 3500 ejemplares de la que tengo el número 102.
PD: Las fotos del libro están sacadas de El fenómeno
mis autoregalos ha sido este flipante sujeta libros de “El Señor de los anillos”, recreando la visita de Gandalf a Bilbo. Hacía tiempo que lo había visto, alucinando en colores no sólo con las figuras sino con su precio casi prohibitivo, pero he aquí que uno de los proveedores de la tienda los estaba liquidando a precio de oferta, y no hay nada más tentador que una rebaja del 30% sobre el precio de coste del producto para la tienda, esas cosas que están haciendo que casi me arruine con cosas que salen casi regaladas.
Ahora que ya tenía las estatuas, sólo me faltaba una cosa para tener la colección completa, un ejemplar de “El Hobbit” que acompañase a los 4 tomitos de “El Señor de los anillos”, que no tardé en pedir como regalo extra a los reyes.
Mis historia con “El Hobbit” es bastante peculiar, la primera vez que intenté leérmelo debía tener 10 u 11 años, y nunca pasé de la página 30, me lo prestó uno de mis mejores amigos, sus padres se lo habían comprado del
circulo de lectores, y a él algo más de un año menor que yo, tampoco le había gustado, debió dejarlo más o menos en el mismo sitio. No fue hasta años después a los quince cuando después de leerme “El señor de los anillos” decidí darle otra oportunidad, y me encantó, pero nunca me lo compré. Me cuesta mucho comprarme libros que ya me he leído, principalmente porque no soy de los que releen, salvo alguna excepción, suelo pensar que un libro releído es una oportunidad perdida de leer otro diferente, como si no hubiera pocos libros ahí fuera esperándote.y… ¿a que viene todo esto? Pues que por fin he encontrado una edición sin la que no podía pasar, que me ha dado ganas no sólo de adquirirla, sino que me ha animado a poner el libro en la lista de posibles relecturas a corto plazo.
Sobre el libro en sí, decir que conmemoran
do el 70 aniversario de su primera aparición los de Planeta/Minotauro nos han traído la edición foránea que celebra el cumpleaños de uno de los libros con los que más he disfrutado, “un viaje de ida y vuelta” para un Hobbit que no quería ni deseaba aventuras pero que por suerte del destino se vio envuelto en una de la que no podía escapar.La edición respeta la primera edición del libro allá por 1937, con ligeros cambios que el propio Tolkien deseó pero que no pudo conseguir
por razones presupuestarias. Viene en una caja de madera preciosa, con un acabado increíble, dentro el libro viene con la famosa portada dibujada por su autor, con un separa páginas en verde y con las páginas en un color sepia maravilloso, además de 16 ilustraciones algunas en color con papel en alta calidad y otras en blanco y negro.Es una edición limitada y numerada a 3500 ejemplares de la que tengo el número 102.
PD: Las fotos del libro están sacadas de El fenómeno
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1 comentario:
Bonito regalo, si señor. Me gusta, se ve que este año fuistes buenecito. La dragona
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