Dos jóvenes norteamericanas, Vicky (Rebecca Hall) y Cristina (Scarlett Johansson) van a Barcelona a pasar unas vacaciones de verano. Vicky es sensible y tiene intención de casarse; Cristina es emocional y busca aventuras sexuales. In Barcelona, ambas se ven envueltas en una relación poco convencional con Juan Antonio (Javier Bardem), un carismático pintor que todavía tiene algo con su tempestuosa ex-mujer, María Elena (Penélope Cruz).
Muchos nos temíamos tras ver la publicidad que se le estaba dando y tras leer distintos comentarios sobre la misma, que esta película iba a ser una especie de lanzadera promocional de la ciudad, pero es que se han pasado, sólo les falta decir el nombre de los restaurantes donde van los protagonistas para ser más descarado.
La historia parece perdida, en ningún momento uno sabe quien es realmente el protagonista de la historia, pero lo peor es que a uno no le importa, es todo tan distante y artificial que resulta difícil creérsela
Además la voz en off no ayuda lo más mínimo, el 50% de la película es narrada sin ningún tipo de gracia, y es la primera vez que este recurso resulta cansino en una película del autor de Manhattan
Otro de los puntos que defrauda es que no es ni una comedia ni un drama, como mucho te esboza alguna sonrisa de vez en cuando. Con un cierto aire que recuerda a "Melinda Melinda", pero ni de lejos se acerca a esta última.
Y toda la parte central de la película, donde la pareja se ve obligada a convivir con la exmujer de Juan Antonio, donde lo mejor es sin ninguna duda es Penélope Cruz, que tiene un papel a su altura, con una fuerza bastante creible, el resto están ahí de paso, soltando sus frases.
En fin que parece que Allen no está demasiado inspirado, o se ha visto forzado en contar una historia que parece no me apetecía contar, tal vez simplemente sea la edad, pero bueno que le vamos a hacer.
Puntuación 5.5
Muchos nos temíamos tras ver la publicidad que se le estaba dando y tras leer distintos comentarios sobre la misma, que esta película iba a ser una especie de lanzadera promocional de la ciudad, pero es que se han pasado, sólo les falta decir el nombre de los restaurantes donde van los protagonistas para ser más descarado.
La historia parece perdida, en ningún momento uno sabe quien es realmente el protagonista de la historia, pero lo peor es que a uno no le importa, es todo tan distante y artificial que resulta difícil creérsela
Además la voz en off no ayuda lo más mínimo, el 50% de la película es narrada sin ningún tipo de gracia, y es la primera vez que este recurso resulta cansino en una película del autor de Manhattan
Otro de los puntos que defrauda es que no es ni una comedia ni un drama, como mucho te esboza alguna sonrisa de vez en cuando. Con un cierto aire que recuerda a "Melinda Melinda", pero ni de lejos se acerca a esta última.
Y toda la parte central de la película, donde la pareja se ve obligada a convivir con la exmujer de Juan Antonio, donde lo mejor es sin ninguna duda es Penélope Cruz, que tiene un papel a su altura, con una fuerza bastante creible, el resto están ahí de paso, soltando sus frases.
En fin que parece que Allen no está demasiado inspirado, o se ha visto forzado en contar una historia que parece no me apetecía contar, tal vez simplemente sea la edad, pero bueno que le vamos a hacer.
Puntuación 5.5
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