Este museo me gustó de lejos muchísimo más que el Louvre, no sólo por el interior, sino el ambiente, y sobretodo por los cuadros de Manet, Monet, Renoir o Van Gogh, a parte de algunas esculturas flipantes.
No sé ni cuanto tiempo estuvimos dentro, pero acabamos agotados, así que nos fuimos directos a ver el Obelisco Egipcio que se trajo Napoleón antes de ir al apartamento a almorzar.Esta noche la gente se va a ver el concierto de Ramstein y llevan meses agotadas (problemas de unirse a un viaje ya programado), así que tras mucho buscar, decido ir a ver si hay entradas para “Sonrisas y lágrimas” que si es en francés al menos me conozco la peli, al final no sólo tengo suerte y consigo entradas por 38€ (que apestan por cierto), sino que el musical está completamente en ingles, no sólo los diálogos si no las canciones.
La obra en sí no está mal, pero no es demasiado espectacular, no hay demasiados actores, y se parece muchísimo a la película, en cuanto a números musicales, tampoco es que lo hubiera visto en cualquier otra ocasión.
Para terminar tenía pensado ir a otro museo que cierra a las 00:00 pero la obra ha durado demasiado y voy algo pillado de tiempo para volver al apartamento teniendo yo las llaves, así que voy directo.
Mañana a Londres!!!
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