Margot Zeller (Nicole Kidman), una inteligente escritora de relatos cortos con una lengua muy afilada que suele crear el caos por donde pasa, decide presentarse por sorpresa a la boda de su hermana Pauline (Jennifer Jason Leigh), a la que no ha visto en bastante tiempo. Margot, acompañada por su hijo Claude (Zane Pais), un chico muy maduro para su edad, llega con la fuerza de un huracán. En el momento en que conoce a Malcolm (Jack Black), el futuro marido de su hermana, empieza a sembrar dudas acerca de la unión. La boda se acerca y las complicaciones se suceden.
Esta semana me he arrepentido como nunca de haber entrado en una sala, no sé puede que yo no estuviera muy motivado, pero me he aburrido como una ostra viendo esta película.
Y la verdad es que no sé que es exactamente lo que falla, a parte de lo obvio, Jack Black, cuya interpretación dramática es simplemente ronda lo ridículo y lo espantoso, provocando risas en la sala cuando se pone a llorar en la pantalla (verídico).
El otro problema es el personaje protagonista de Margot, es tan seco, árido, y Kidman le da una interpretación tan de piloto automático, que es difícil de digerir, pero yendo más allá, creo que simplemente la historia no funciona, es demasiado superficial, no te llega en ningún momento, y los diálogos con su hijo, no se integran en la historia como debería. Es como si se le escapase de las manos cualquier posibilidad de ritmo o de coherencia en la historia. Es como intentar hacer una historia a lo Eric Rohmer, pero perdiéndose por el camino.
En resumidas cuentas, el problema es tal que la primera vez que miré el reloj para ver cuando quedaba de película sólo llevaba 25 minutos, simplemente no me ha gustado nada de nada.
Puntuación 4
Esta semana me he arrepentido como nunca de haber entrado en una sala, no sé puede que yo no estuviera muy motivado, pero me he aburrido como una ostra viendo esta película.
Y la verdad es que no sé que es exactamente lo que falla, a parte de lo obvio, Jack Black, cuya interpretación dramática es simplemente ronda lo ridículo y lo espantoso, provocando risas en la sala cuando se pone a llorar en la pantalla (verídico).
El otro problema es el personaje protagonista de Margot, es tan seco, árido, y Kidman le da una interpretación tan de piloto automático, que es difícil de digerir, pero yendo más allá, creo que simplemente la historia no funciona, es demasiado superficial, no te llega en ningún momento, y los diálogos con su hijo, no se integran en la historia como debería. Es como si se le escapase de las manos cualquier posibilidad de ritmo o de coherencia en la historia. Es como intentar hacer una historia a lo Eric Rohmer, pero perdiéndose por el camino.
En resumidas cuentas, el problema es tal que la primera vez que miré el reloj para ver cuando quedaba de película sólo llevaba 25 minutos, simplemente no me ha gustado nada de nada.
Puntuación 4
No hay comentarios:
Publicar un comentario