lunes, 17 de diciembre de 2007

"Deseo, peligro" de Ang Lee (2007)

Shanghai, 1942. La ciudad está ocupada por los japoneses. La Sra. Mak, una mujer sofisticada y adinerada, entra en un café, hace una llamada y se sienta a esperar. Recuerda... cómo empezó todo hace unos años, en la China de 1938, cuando siendo estudiante universitaria y conoció a Kuang Yu Min, que acababa de fundar una sociedad teatral para fomentar el patriotismo. Wong Chia Chi se convirtió en la primera actriz de la compañía y descubrió que era capaz de conmover al público y a Kuang. Este último convenció a un grupo de estudiantes para llevar a cabo un ambicioso plan para asesinar a un importante colaborador de los japoneses…

La nueva película de Ang Lee es un melodrama con alto contenido sexual, aunque más bien podríamos decir que son películas en lugar de una. La cinta se puede dividir perfectamente en dos partes, una ambientada en el pasado y otra en el presente, ambas perfectamente hilvanadas pero con toques diferentes.

Lo que más sobresale es todo el trabajo de dirección artística, hasta el más mínimo detalle está creado para ambientar la época, desde los decorados, decoración hasta el sublime vestuario que lucen todos los personajes.

Otro de los aspectos más destacados son los actores, la protagonista Tang Wei hace su debut de manera impresionante, desde la más sutil sonrisa hasta el ligero contoneo con el que anda parece perfectamente calculado, su réplica Tony Leung le sigue a la par con otra de esas interpretaciones que se recuerdan durante mucho tiempo.

Pero sin duda el gran artífice de la película es Ang Lee, que dota de maestría toda la película, saca de los actores todo lo que pueden dar, es increíble ver todo lo que logra sacar de una simple mirada, de un tenue movimiento de cabeza, la caída de los ojos, un trabajo portentoso. Además sabe moverse como nadie por los distintos momentos, la tensión que se crea en la habitación cuando los estudiantes están recogiendo y el momento posterior es absolutamente atroz, en el hotel las escenas de sexo son estremecedoras, la descripción de Tang Wei de lo que hace te pone los pelos de punta, la tensión que se vive en el ambiente cuando los personajes no saben si se están metiendo en una trampa, magistral.

El gran pero de la historia es su duración, unos 158 minutos que dejan algo de huella, y no porque la historia se haga aburrida o porque no tenga nada que contar, sino más bien lo contrario, intenta narrar demasiadas cosas y llega un momento en que el ritmo de narración hace peso en la duración hace aparición. Aún así puedo afirmar que estamos ante otra de las maravillas de su director.

Puntuación 8

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Pos tendré que verla. D&D

Anónimo dijo...

No me lo voy a leer hasta que no vea la película. ¡Tengo unas ganas!. BMil.

ALG dijo...

Aquí estará esperandote, no obstante ya sabes que intento contar lo menos posible para no destripar las pelis.

Pos eso

Anónimo dijo...

Sí, sé que cuentas poco pero... ¡Me encantó!, disfruté mucho. A veces tengo mucho miedo de ir a ver una película que me apetece porque lo peor es la desilusión. Éste no ha sido el caso, y no me pareció larga -raro en mí, ya que últimamente a casi todo le encuentro exceso de metraje-. Es verdad que la dirección artística es espectacular.Hay muchas cosas que me gustaron, pero destacaría el principio,el juego de las mujeres, y la escena en la que "ella" cuenta a unos hombres, que con un falso pudor -que no han tenido durante "tres años"- no quieren oír qué ha significado,su relación física con el protagonista.
También hay cosas que no me gustaron tanto... pero estamos en navidad, y me voy a quedar sólo con lo bueno.BMil.